Las infecciones por herpes son muy comunes. Entre el 50 y el 80 por ciento de los adultos estadounidenses tienen herpes oral (VHS-1), que causa herpes labial o ampollas de fiebre en o alrededor de la boca. El herpes genital, causado por el VHS-1 o el VHS-2, afecta a una de cada seis personas de entre 14 y 49 años en Estados Unidos. Las infecciones por herpes genital pueden ser asintomáticas o manifestarse en forma de brotes de ampollas o llagas.
Estas afecciones víricas comunes se transmiten por contacto íntimo de persona a persona. En el caso del VHS-1, los besos o el sexo oral pueden transmitir la infección a otra persona, mientras que el VHS-2 puede contraerse a través del sexo vaginal, anal u oral con alguien que tenga el virus. Una madre infectada por el virus del herpes puede transmitir el virus a su bebé durante el parto si el virus está activo en ese momento.
En raros casos, la infección por VHS-1 o VHS-2 puede provocar meningitis (inflamación de la cubierta del cerebro y la médula espinal) o encefalitis (inflamación del cerebro).
El tratamiento de las infecciones por herpes puede disminuir la frecuencia o la intensidad de los brotes.