6.4.1 Teorías de los rasgos
Las teorías de los rasgos del liderazgo identifican los rasgos específicos de la personalidad que distinguen a los líderes de los no líderes. Se basan en la premisa de que los líderes «nacen, no se hacen» (es decir, que el liderazgo es en gran medida innato, en lugar de desarrollarse mediante el aprendizaje). Las primeras investigaciones (Mann, 1959; Stogdill, 1948) se centraron en la relación entre la personalidad y el liderazgo, pero aportaron pocas pruebas. No obstante, el interés de la investigación en esta área continúa, y Judge y Bono (2004) informan de que el 12% de toda la investigación sobre liderazgo publicada entre 1990 y 2004 incluía las palabras clave «personalidad» y «liderazgo».
Con el fin de revisar las pruebas de una relación sustantiva entre la personalidad y el liderazgo, Lord, De Vader y Alliger (1986) realizaron un meta-análisis. En él se incluyeron los estudios revisados originalmente por Mann (1959) y los publicados posteriormente. Lord et al. (1986) demostraron que existían correlaciones meta-analíticas significativas entre las percepciones de liderazgo y la inteligencia, la masculinidad y la dominancia. Es importante señalar que estas características se asociaron con las percepciones de liderazgo, más que con los comportamientos o el desempeño del líder, por lo que no reflejan características personales que puedan estar relacionadas con la eficacia del líder. Un meta-análisis posterior, realizado por Judge, Bono, Iles y Gerhardtl (2002), encontró que las cinco grandes dimensiones de la personalidad (es decir, amabilidad, consciencia, extraversión, neuroticismo y apertura) eran predictores significativos tanto de la emergencia del liderazgo (explicando el 28% de la varianza) como de la eficacia del líder (explicando el 15% de la varianza).
Una de las principales críticas a la teoría de los rasgos es su enfoque simplista; que no tiene en cuenta otros factores que influirán en el desarrollo de un líder de éxito (por ejemplo, factores situacionales y ambientales). Una investigación reciente, basada en gemelos idénticos y fraternos, pudo estimar la heredabilidad de la aparición del liderazgo en un 30% (Avery, Zhang, Avolio, Kruegar, 2007). Esto significa que el 70% restante se debe a factores situacionales (por ejemplo, la exposición a modelos de liderazgo) durante la carrera profesional. No obstante, muchas organizaciones utilizan la evaluación de la personalidad como parte de sus procedimientos de selección para puestos directivos o de liderazgo.
Utilización de la evaluación de la personalidad por parte del Gobierno del Reino Unido para el
nombramiento de altos funcionarios
Como parte de los procedimientos de selección de la Administración Pública del Reino Unido, los candidatos rellenan un cuestionario de personalidad, la medida de personalidad «16PF5», con el fin de evaluar el estilo de trabajo y liderazgo del individuo. El cuestionario es de opción múltiple y consta de 183 preguntas, con instrucciones y ejemplos sobre cómo rellenarlo. Se trata de un cuestionario administrado electrónicamente que se completa y devuelve a través de un archivo adjunto por correo electrónico.
El perfil de personalidad resultante se discute con el candidato como parte de una entrevista inicial individual y una evaluación con un psicólogo laboral. Esta discusión tiene como objetivo proporcionar información sobre el estilo de liderazgo del candidato.
Las cualidades de liderazgo con las que se evalúa al candidato son las siguientes:
-Resultados – centrarse en el impacto, el desafío y la mejora, involucrar a las partes interesadas;
-Integridad – conciencia de sí mismo, confianza en sí mismo, trabajo en equipo;
-Capacidad – cultivar la innovación, obtener lo mejor de todos, crecer a partir de la experiencia;
-Dirección – inspirar con visión, aprovechar la oportunidad y tomar decisiones difíciles.
Fuente: www.dfid.gov.uk/recruitment/files/psychometric.pdf . (c) Crown copyright 2009, Department for International Development.
Tarea rápida: ¿Qué rasgos del 16PF se relacionan con las cualidades de liderazgo destacadas? ¿Crees que alguno de los otros 16 rasgos del FP se asociaría con el liderazgo? ¿Por qué?
El enfoque de los rasgos no sólo se ha aplicado para identificar a los buenos líderes, sino también a los líderes que «descarrilan» (es decir, que progresan bien, pero luego se estancan en sus carreras, son degradados, despedidos o abandonan la organización). Hogan y Hogan (2001) argumentaron que el liderazgo fallido está vinculado a características de personalidad ‘sobreactuadas’, que, por lo tanto, se convierten en disfuncionales:
- SCHIZOID: frialdad emocional, desapego, indiferencia
- PASIVO-AGRESIVO: indiferente al rendimiento laboral normal, irritado cuando se le dice que haga algo que no quiere
- NARCISISTA arrogante &altanero, sentido grandioso de la autoimportancia
Aunque algunas investigaciones se han centrado en los rasgos de personalidad, que son factores disposicionales, el concepto de «descarrilamiento» puede entenderse en términos de la persona, su comportamiento y el contexto en el que se desenvuelve. Uno de los aspectos importantes del «descarrilamiento» es que los directivos demuestran tener pocas habilidades interpersonales y la incapacidad de dirigir a su equipo.
Una tarea rápida: ¿Puedes identificar algunos aspectos del buen liderazgo que también tienen el potencial de causar daño a las organizaciones y a sus empleados?