Desde hace un par de años, tengo la suerte de hablar en la conferencia Broad Advantage en Nueva York. Parte de la increíble organización de Janet Hanson, 85 Broads, este programa de una semana de duración ofrece una serie de oradores y experiencias para unas 100 mujeres universitarias que están interesadas en carreras empresariales.
Hace unos días pedí a cada miembro del grupo de este año que esbozara y luego describiera al resto de nosotros su visión personal de liderazgo, una imagen convincente de un futuro alcanzable. La visión de liderazgo es un medio esencial para centrar la atención en lo que más importa; lo que quieres lograr en tu vida y el tipo de líder que deseas ser. Una visión útil tiene que estar arraigada en su pasado, dirigirse al futuro y abordar las realidades de hoy. Representa quién eres y qué representas. Te inspira a ti, y a las personas cuyo compromiso necesitas, a actuar para realizar un cambio constructivo hacia un futuro que todos queréis ver.
Veamos un poco más de cerca los cuatro componentes clave:
- Una historia convincente del futuro es atractiva; capta el corazón, obliga a prestar atención. Los que la escuchan quieren formar parte de ella de alguna manera. Y se sienten conmovidos.
- ¿Cómo es su futuro – cuál es la imagen? Si otros pudieran viajar al futuro con usted, ¿qué encontrarían? Una visión de liderazgo bien elaborada se describe en términos concretos que son fáciles de visualizar y recordar.
- La historia de su futuro debe ser un reto, pero también debe ser alcanzable. Si no fuera alcanzable, tendrías poca motivación para molestarte en intentarlo.
- Finalmente, el futuro simplemente significa allá afuera – algún tiempo desde este momento en adelante, pero no tan lejos que esté fuera de alcance.
¿Qué contribuciones a nuestro mundo sueñan hacer estas jóvenes? Todo el grupo escuchó a algunos miembros y luego nos dividimos en grupos más pequeños para que todos pudieran compartir los suyos. Las visiones de liderazgo de estas jóvenes fueron inspiradoras. La mayoría de ellas están dispuestas a tener éxito no sólo en sus carreras, sino también en la formación de familias afectuosas y en la realización de contribuciones significativas a la sociedad. Algunos ejemplos: sanar las divisiones políticas entre naciones que ahora están empeñadas en destruirse mutuamente, encontrar formas creativas y prácticas de alimentar a los hambrientos y fortalecer nuestro cada vez más frágil medio ambiente.
Al volver a Filadelfia, me sentí optimista de que la próxima generación de líderes empresariales va a dedicar más energía y atención que la mía a hacer un mundo mejor que el que han heredado.
¿Cuál es
su visión personal del liderazgo? ¿Cómo se compara con las aspiraciones vitales y profesionales de estas futuras mujeres de negocios?