Juan de Onate (también conocido como Don Juan de Oñate y Salazar, 1550 – 1626) es un famoso explorador, conquistador y gobernador colonial español que jugó un papel fundamental en la exploración de los territorios norteamericanos que hoy forman parte del suroeste americano. Sus hazañas más recordadas son las visitas a los Grandes Planos, el valle inferior del río Colorado, la reclamación de territorios en Nuevo México y el encuentro con las numerosas culturas nativas americanas locales (algunas de las cuales entraron en feroz combate contra él y su estricto gobierno). Muchos historiadores se refieren a él como «El último conquistador».
La vida temprana de Juan de Onate comenzó en la ciudad de Zacatecas en el actual México (entonces conocida como Nueva España). Era hijo del colono hispano-vasco, dueño de minas de plata y conquistador Cristóbal de Oñate, y de la madre Doña Catalina Salazar y de la Cadena. Juan de Onate se casó con Isabel de Tolosa Cortés de Moctezuma, nieta del más famoso conquistador de todos los tiempos Hernán Cortés, que destruyó el imperio azteca.
A la edad de 48 años, Juan de Onate inició su carrera de exploración y colonización de tierras inexploradas en lo más profundo del continente norteamericano. El primer viaje fuera de Nuevo México lo inició en 1598 cuando cruzó el Río Grande y comenzó a colonizar tierras y a difundir el catolicismo romano entre los nativos locales. Se encontró con los indios Pueblo, fundó la provincia de Santa Fe y luchó en la gran batalla de Acoma contra los Pueblo que no querían entregar todos sus suministros de invierno a la expedición de Onate. En esa batalla, Onate mató a más de 800 hombres, mujeres y niños, y esclavizó a los 500 restantes (de los cuales todos los hombres mayores de 25 años fueron castigados con la amputación del pie izquierdo).
La siguiente gran expedición de Juan de Onate comenzó en 1601 cuando puso sus ojos en las Grandes Llanuras. Con un grupo de 130 soldados experimentados, 12 sacerdotes y un séquito de sirvientes, comenzó su búsqueda de la legendaria ciudad del oro. Por supuesto, no la encontró, pero se encontró con el pueblo apache, viajó a Oklahoma, visitó al pueblo de los escanjaques, describió el primer encuentro de la pradera de hierba alta del centro de Norteamérica, y hacia el final del viaje se encontró con el pueblo de los rayados, cuyo jefe Caratax guió a la partida de Onate a través de la tierra que le era conocida. En el viaje de vuelta a casa, Juan de Onate se vio envuelto en una gran batalla contra el pueblo de los Escanjaques.
La expedición final de Juan de Onate se centró en el río Colorado y contó con la participación de una pequeña parte de unas 30 a 40 personas. Viajaron entre el Río Grande hasta el Golfo de California en 4 meses, logrando traer relatos de la zona y sugerencias sobre el establecimiento de un puerto en el Golfo de California.
En 1606, sus días de exploración y conquista de tierras terminaron después de que se le obligara a regresar a la Ciudad de México por escuchar su extrema crueldad tanto con los nativos como con los colonos. No fue encarcelado, pero finalmente viajó de vuelta a España, donde recibió el cargo de jefe de todos los inspectores de minas por orden del rey español. Murió en 1626, recordado por algunos por sus importantes esfuerzos de exploración, y por muchos como hombre cruel que mataba y torturaba indiscriminadamente.