Signo del zodiaco del 17 de junio – Géminis
Al ser un Géminis nacido el 17 de junio, probablemente estés acostumbrado a que te llamen hablador. Esto no es una coincidencia, ya que te entusiasmas más cuando interactúas con el mundo que te rodea. Tu mente puede transformar su funcionamiento privado en una útil visión de grupo con facilidad. Esta habilidad impresiona a tus amigos, colegas y compañeros, pero siempre te ha parecido natural. Siempre has notado un claro poder social sobre los demás.
Elemento del 17 de junio – Aire
El signo Géminis está emparejado con el elemento aire y, de hecho, tienes la conexión más fluida con el aire de los 12 signos del zodiaco. Es debido a la influencia del aire en movimiento que la curiosidad y la búsqueda del conocimiento parecen agitarse dentro de ti constantemente. Tus intereses se mueven en diversas direcciones y no tienes más remedio que seguirlos. De este modo, la influencia del aire es uno de los mayores contribuyentes a tu personalidad única. Debes tener cuidado con las cualidades del aire estancado, que puede crear un estado poco emocional y distante.
17 de junio Planeta regente – Mercurio
El planeta regente de Géminis es Mercurio, pero debido a que has nacido en el tercer Decán, o parte, del signo, tu personalidad también recibe la influencia planetaria de Urano. Mientras que la influencia de Mercurio se ve en tus excepcionales habilidades mentales, Urano influye en tu búsqueda de la originalidad. Te das cuenta de que desviarse de la norma no es negativo, sino que es una fuente de libertad y alegría. La libertad, que utilizas tan activamente para perseguir una amplia gama de temas aparentemente no relacionados, es uno de tus mayores activos. Sin embargo, si eres extremadamente reacio a centrarte, puede resultarte difícil completar proyectos y tareas.
Personalidad de Géminis del 17 de junio
Los géminis nacidos el 17 de junio son inusualmente serios. Se preocupan por triunfar en la vida, pero un espíritu de rebeldía se esconde detrás de sus fachadas aparentemente conservadoras y tradicionales. Tienen una visión propia, pero no siempre están seguros de cómo lograrla.