Consejos de inversión aparte, una oda a todo lo bueno que hace Dave Ramsey

Dave Ramsey es el peso pesado de todos los pesos pesados de las finanzas personales. Lleva décadas ayudando a la gente a enderezar sus finanzas personales. Su programa de radio diario es el tercero más escuchado del país.

Ramsey también puede ser un pararrayos para las críticas. Un ejemplo: en 2013, escribí un artículo en el que criticaba sus supuestos de inversión (contar con un rendimiento anual del 12%), y sus sugerencias para la jubilación (una «tasa de retirada segura» del 8%). Eso llevó a una aparición en su programa de radio que fue polémico, por decir lo menos.

Así, la mayoría asume que estoy en contra de todas las cosas de Ramsey. Esta semana, un amigo de la universidad me envió un enlace a este artículo de The Guardian: «El hombre que quiere ayudarte a salir de las deudas… a cualquier precio». Después de leerlo, hay una cosa que vale la pena tener clara: Es posible estar en desacuerdo vehementemente con los consejos de inversión de Ramsey y, al mismo tiempo, darle todo el crédito del mundo por sus consejos de finanzas personales.

Cuando confundimos las dos cosas -o insinuamos que hay algo moralmente incorrecto en ayudar a la gente a salir de las deudas- todo el mundo en la comunidad financiera pierde.

Fuente de la imagen: Getty Images.

Las tuercas y los tornillos de los «pasos de bebé» de Ramsey.

Ramsey ha establecido un sistema de siete sencillos pasos para ayudar a la gente a poner sus finanzas en orden. Incluye:

  1. Ahorrar 1.000 dólares para un fondo de emergencia inicial.
  2. Pagar todas las deudas (excepto la de la casa) utilizando el método de la bola de nieve de la deuda (más adelante se habla de ello).
  3. Ahorrar de tres a seis meses de gastos para tener un fondo de emergencia totalmente financiado.
  4. Invertir el 15% de los ingresos de su hogar para la jubilación.
  5. Ahorrar para el fondo universitario de sus hijos.
  6. Pagar su casa antes de tiempo.
  7. Construir riqueza y regalar (algo).

Es difícil encontrar expertos financieros que tengan problemas con estas prioridades. Son sólidas como una roca.

Algunos no están de acuerdo con el «método de la bola de nieve de la deuda», ya que le anima a pagar su deuda «en orden por el saldo de menor a mayor – independientemente de la tasa de interés». Al centrarse en los saldos más pequeños y no en los tipos de interés, algunos argumentan que los seguidores de Ramsey pueden estar permitiendo que su deuda crezca más rápido de lo necesario. Esto, según la teoría, conduce a un reembolso de la deuda que no es óptimo.

Pero aquí está el problema: Ramsey está tratando de ayudar a la gente real en el mundo real, no a la gente abstracta en un mundo hipotético. Las personas reales tienen emociones, sentimientos y niveles de motivación que van y vienen. El método de la bola de nieve proporciona un estímulo psicológico («¡Sí, he eliminado esa cuenta!») que puede crear el impulso necesario para eliminar deudas mayores. Hay pruebas significativas, revisadas por pares, de las mejores universidades que respaldan a Ramsey.

Esta es una rápida introducción al marco de Ramsey, pero no llega a las grandes cuestiones que merece la pena abordar.

¿Quién tiene la culpa de tus problemas de dinero?

El quid del artículo de The Guardian es que algunos consideran injusta la atribución de la culpa del endeudamiento por parte de Ramsey: «Tal y como lo ve Ramsey, la crisis de la deuda de Estados Unidos es una epidemia parecida a la adicción a las drogas, y sus raíces se encuentran en el comportamiento individual», dice. «La única manera de escapar de su aplastante peso es dejar de habilitarse a sí mismo y pasar al síndrome de abstinencia: vivir a base de arroz y frijoles, conseguir un segundo trabajo, vender el coche que chupa el dinero».

Prosigue citando a expertos que en general están de acuerdo con los siete pasos, pero detestan el contexto en el que se dan. Simplemente creo que lo más útil es desechar por completo los juicios de valor y preguntar: ¿Funciona?

Según Ramsey, más de 5 millones de personas han completado su Universidad de la Paz Financiera, decenas de millones la escuchan todos los días, y si hay que creer los «Gritos sin deudas» (y no veo ninguna razón para que no lo sean), la respuesta para un gran número de personas es claramente: ¡SÍ!

No voy a argumentar que no hay razones estructuralmente injustas por las que algunas personas tienen más dificultades que otras para llegar a fin de mes. Pero, como me recuerda constantemente mi mujer -y como aprendí como profesor de secundaria en el centro de la ciudad-, no se puede descuidar el «y».

Con esto quiero decir que se puede reconocer que hay problemas estructurales que necesitan atención y reconocer que ayudar a la gente a centrarse en las cosas que controlan es enormemente útil. Estas cosas no son mutuamente excluyentes. De hecho, el programa de Ramsey podría -en cierto modo- verse como una respuesta estructural a un enorme problema de la sociedad estadounidense actual: la falta de educación financiera básica.

Si Ramsey fuera un funcionario electo, podría justificarse una perspectiva diferente. Pero no lo es, y nadie va a ofrecer un servicio que sea querido por todos. Sin embargo, el programa de Ramsey claramente ayuda a mucha gente y todos somos mejores por ello.

Acerca de ese consejo de inversión…

Sólo una pequeña parte del mensaje de Ramsey gira en torno al proceso de inversión. Por una u otra razón, sugiere:

  1. Asumir un rendimiento del 12% cada año en la bolsa. La verdad, que se remonta a 1871 (y termina el año pasado), es que la media compuesta ha sido del 9,2%. En los últimos 100 años, el 10,5%. En los últimos 50 años, el 10,2%. En los últimos 20 años, el 6,7%. Puede comprobarlo usted mismo aquí. Pueden parecer pequeñas diferencias, pero la capitalización es la octava maravilla del mundo, y las pequeñas diferencias de puntos porcentuales son un gran problema. Ramsey sí lo cubre diciendo: «No dejes que tu opinión sobre si crees que es posible o no un rendimiento del 12% te impida invertir». No podría estar más de acuerdo.
  2. Retirar de forma segura el 8% de sus ahorros en el primer año y ajustarse a la inflación a partir de entonces. Ya he destacado los riesgos de este supuesto tan agresivo.
  3. Invertir en fondos de inversión con altas comisiones. Ramsey sugiere invertir fondos de inversión en cuatro áreas: internacional, crecimiento, crecimiento e ingresos y crecimiento agresivo.

Si bien los fondos de inversión no tienen nada de malo en sí mismos, las comisiones que se cobran y las normas que rigen su gestión dificultan (aunque hay que reconocer que no son imposibles) que cualquier fondo iguale sistemáticamente el rendimiento del mercado.

Pero no creo que estos tres consejos anulen el valor del mensaje de Ramsey. Tal vez sólo necesitan ser equilibrados por algunas de nuestras creencias fundamentales sobre la inversión aquí en The Motley Fool. A saber:

  1. Se puede conseguir un 12%, pero no hay que apostar por ello. Definitivamente es posible obtener un 12% o más cada año. Muchos de nuestros mejores inversores aquí tienen un historial que lo demuestra. Sin embargo, suponer que obtendrá esos rendimientos es poner sus expectativas más altas de lo que la historia demuestra claramente que deberían ser.
  2. Es mucho más seguro sacar entre el 3% y el 5% de sus ahorros en el primer año y ajustarlo a la inflación a partir de entonces.
  3. Es totalmente posible vencer al mercado convirtiéndose en un inversor individual. Pero si eso no le interesa, invertir en una cesta diversificada de fondos indexados (con tarifas muy bajas) es perfectamente razonable.

Cuando se combinan estas lecciones intemporales -tanto en finanzas personales como en inversión- los resultados pueden proporcionarle la paz financiera que Ramsey promete y ha entregado a tantos.

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