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¿Realmente las necesita?

Es discutible si necesita conocer su grasa corporal en primer lugar. Es cierto que el peso corporal puede ser engañoso porque no indica cuánto es de grasa y cuánto es de músculo. Pero no existe una norma ampliamente aceptada para la grasa corporal ideal; depende de la edad, el sexo, la forma física y el origen étnico. Según algunos expertos, un rango «saludable» es del 23 al 33% para las mujeres de mediana edad, del 11 al 21% para los hombres de mediana edad y hasta el 35% para las mujeres mayores y el 24% para los hombres mayores. Los deportistas suelen tener mucha menos grasa corporal.

Además, más importante que la grasa corporal total es dónde se distribuye la grasa, y esto no lo dicen las básculas de grasa corporal. El exceso de grasa en la zona abdominal (como en un cuerpo con «forma de manzana») está relacionado con las enfermedades cardiovasculares, la diabetes y algunos cánceres, mientras que la grasa en los muslos y las caderas (un cuerpo con «forma de pera») no es un problema de salud e incluso puede ser protectora. En un estudio realizado en 2009 en Obesity, las lecturas de dos básculas de grasa corporal sólo se correlacionaron débilmente con los factores de riesgo relacionados con la obesidad, como los lípidos en sangre y el azúcar en sangre en ayunas.

Por otro lado, algunos investigadores afirman que las básculas de grasa corporal pueden ser útiles para hacer un seguimiento de los cambios de la grasa corporal a lo largo del tiempo y que pueden ayudar a motivar a algunas personas a perder peso (las básculas normales también pueden hacer esto, por supuesto). Aun así, el análisis de la grasa corporal no es algo que deba hacerse a diario o semanalmente.