Aunque hay literalmente docenas de factores que entran en juego para la concepción, las hormonas son una parte importante de la ecuación; equilibrarlas puede ser clave para un embarazo exitoso.
Si está luchando contra la infertilidad, es posible que haya oído hablar de una hormona llamada prolactina. Siga leyendo para saber más sobre cómo funciona en su cuerpo, cómo afecta a su fertilidad y cómo puede equilibrar los niveles de prolactina para ayudar a aumentar sus posibilidades de concebir.
¿Qué es la prolactina?
La prolactina, también conocida como hormona luteotrópica o luteotropina, es una proteína que se encuentra tanto en las mujeres como en los hombres. La función más común es permitir a las hembras producir leche. Se produce en la glándula pituitaria anterior, así como en el útero, el cerebro, las mamas, la próstata, el tejido adiposo, la piel y las células inmunitarias.
Aunque normalmente no causa muchos problemas, según la Red de Salud Hormonal de la Sociedad Endocrina, un exceso de prolactina en la sangre provoca hiperprolactinemia. Los efectos secundarios de los niveles elevados de prolactina y la consiguiente hiperprolactinemia pueden incluir una menstruación irregular, así como deficiencias de estrógeno y testosterona que dificultan la concepción.
¿Un nivel alto de prolactina causa infertilidad?
Si se encuentran niveles altos de prolactina antes del embarazo, puede ser un indicador de problemas hormonales más profundos. La producción normal de estrógeno y progesterona puede verse afectada, lo que significa que la ovulación puede volverse irregular o incluso detenerse por completo.
La hiperprolactinemia puede indicar también otros problemas de salud, como tumores hipofisarios, hipotiroidismo, enfermedades hepáticas o renales, o anorexia. Si los niveles de prolactina son elevados, es importante tratar estos problemas de salud antes de intentar concebir, ya sea de forma natural o mediante un tratamiento de fertilidad. La hiperprolactinemia es reversible y, con la atención adecuada, es relativamente fácil volver a los niveles normales de prolactina para el embarazo.
Tratamiento de los niveles altos de prolactina
Uno de los tratamientos más comunes es un agonista de la dopamina, un medicamento que ayuda al cerebro a producir dopamina para controlar los niveles altos de prolactina. También se puede sugerir la cirugía si se descubre un tumor de prolactinoma.
Una combinación de medicación y cirugía suele tratar la prolactina alta, pero también es posible reducirla con un tratamiento natural. En primer lugar, echa un vistazo a algunos de los factores externos. Según Healthline.com, los factores de estrés comunes pueden elevar los niveles de prolactina; el bajo nivel de azúcar en la sangre, el ejercicio extenuante y ciertos medicamentos psiquiátricos y de reflujo ácido también podrían desempeñar un papel.
Dado que los estudios ya han demostrado que el estrés está relacionado con la infertilidad, la incorporación de técnicas de relajación en la vida diaria puede tener un importante efecto positivo en muchos de los factores que contribuyen a ella.
También hay que tener en cuenta la nutrición. Los alimentos que reducen los niveles de prolactina suelen tener un alto contenido de zinc; piense en el marisco, la ternera, el pavo y las judías. También es importante consumir mucha vitamina B6, por lo que alimentos como las patatas, los plátanos, el salmón salvaje, el pollo y las espinacas pueden ayudar a aumentar esos niveles de vitamina. La hierba del árbol casto ha demostrado su eficacia para reducir la prolactina, y la homeopatía también puede ser útil para equilibrar las hormonas. Es importante discutir las opciones de tratamiento con su médico o un médico naturista para determinar el mejor curso de acción para usted.
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