Causas
Su médico le hará un examen físico y tendrá en cuenta los síntomas que tenga junto con sus problemas médicos anteriores para averiguar qué hay detrás de su resultado.
Problemas de médula ósea: El centro esponjoso de sus huesos, que se llama médula ósea, produce células sanguíneas. Los recuentos bajos de glóbulos blancos suelen estar relacionados con problemas de médula ósea. Estar cerca de ciertas sustancias químicas, como el benceno y los pesticidas, así como algunos tipos de cáncer y tratamientos contra el cáncer, incluyendo la quimioterapia y la radiación, pueden dañar la capacidad de su médula ósea para producir glóbulos blancos.
Trastornos autoinmunes: Algunas enfermedades autoinmunes, como el lupus y la artritis reumatoide, hacen que su cuerpo ataque y destruya sus propios glóbulos blancos.
Infecciones: Los virus pueden afectar a la médula ósea y provocar un nivel bajo de glóbulos blancos durante un tiempo. Las infecciones graves, como las infecciones de la sangre, pueden hacer que su cuerpo utilice los glóbulos blancos más rápido de lo que puede producirlos. El VIH mata un tipo específico de glóbulos blancos.
Medicamentos: Algunos medicamentos, incluidos los antibióticos, pueden destruir los glóbulos blancos.
Nutrición: No comer bien o tener niveles bajos de ciertas vitaminas, como el ácido fólico y la vitamina B12, puede afectar a la forma en que el cuerpo produce glóbulos blancos. El abuso del alcohol puede alterar los nutrientes del organismo y también el recuento de glóbulos blancos.
Problemas en el bazo: El bazo también produce glóbulos blancos. Las infecciones, los coágulos de sangre y otros problemas pueden hacer que se inflame y no funcione como debería. Esto reducirá su recuento de glóbulos blancos.