Mito del cáncer: Los desodorantes y el cáncer de mama

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En resumen

No hay pruebas suficientes que respalden la creencia de que el uso de antitranspirantes/desodorantes aumente el riesgo de padecer cáncer de mama o Alzheimer. La Sociedad Americana del Cáncer (ACS) afirma que el principal riesgo relacionado con el uso de estos productos es que pueden causar irritación de la piel si se infecta una mella o un corte con la cuchilla de afeitar.

Origen del mito

El mito de que el desodorante provoca cáncer de mama ha circulado a través de correos electrónicos, en páginas web e incluso en periódicos. Las historias suelen difundir el mito de que el aluminio de los desodorantes y antitranspirantes es absorbido por la piel e impide que las toxinas salgan del cuerpo. Este artículo explica por qué estas creencias son falsas.

Pruebas actuales

En 2016 se publicó una revisión reciente de las pruebas científicas.1 En ella se determinó que no había relación entre el uso de antitranspirantes/desodorantes y el riesgo de contraer cáncer de mama. Solo dos estudios tenían la calidad suficiente para ser incluidos en la revisión.

El primero se publicó en The Journal of The National Cancer Institute en 2002 explorando la relación entre los cánceres de mama y los antitranspirantes o desodorantes en 1606 mujeres. Los resultados no mostraron un mayor riesgo de cáncer entre las usuarias de desodorantes o antitranspirantes, ni entre las mujeres que se afeitaban antes de usar desodorantes o antitranspirantes.2

El segundo fue otro pequeño estudio de casos y controles realizado en 2006, en el que se descubrió que el 82% de los controles (mujeres sin cáncer de mama) y el 52% de los casos (mujeres con cáncer de mama) usaban antitranspirantes, lo que indica que el uso del producto para las axilas podría proteger contra el cáncer de mama.3 Aunque el estudio es demasiado pequeño para hacer tal afirmación, ciertamente no apoya la historia de que «los antitranspirantes causan cáncer».

Los antitranspirantes funcionan mediante sales de aluminio que bloquean las glándulas sudoríparas, no los ganglios linfáticos. Aunque los ganglios linfáticos eliminan las toxinas, no las eliminan mediante el sudor. La mayoría de los carcinógenos se eliminan a través del hígado o los riñones y se excretan.4,5 También es pertinente señalar que el cáncer de mama comienza en la mama y se extiende a los ganglios linfáticos, y no al revés.

Organizaciones fiables como el Instituto Nacional del Cáncer estadounidense, Cancer Research UK, la Sociedad Americana del Cáncer y la mayoría de las demás autoridades importantes sugieren que la relación entre el uso de desodorantes o antitranspirantes y el cáncer de mama no está confirmada, o simplemente es un mito.

Los estudios demuestran que no existe ninguna relación entre el uso de antitranspirantes y la enfermedad de Alzheimer. Los seres humanos están expuestos al aluminio a través de los alimentos, los envases, las sartenes, el agua, el aire y los medicamentos. Del aluminio al que estamos expuestos, sólo se absorben cantidades mínimas, que normalmente se excretan o se almacenan inofensivamente en los huesos. En cualquier momento, el cuerpo humano medio contiene mucho menos aluminio que una pastilla de antiácido. La Sociedad de Alzheimer afirma que la relación entre el aluminio ambiental y la enfermedad de Alzheimer parece cada vez más improbable.6

1. Allam, M. Breast caner and deodorants/antiperspirants: a systematice review. Revista centroeuropea de salud pública. 2016;24(3), 245-27.
2. Mirick DK, Davis S, Thomas DB. El uso de antitranspirantes y el riesgo de cáncer de mama. J Natl Cancer Inst. 2002 Oct 16;94(20):1578-80.
3. Fakri S, Al-Azzawi A, Al-Tawil N. Antiperspirant use as a risk factor for breast cancer in Iraq. East Mediterr Health J. 2006 May-Jul;12(3-4):478-82.
4. Darbre PD. Aluminio, antitranspirantes y cáncer de mama. J Inorg Biochem. 2005 Sep;99(9):1912-9.
5. Exley C. ¿Aumenta el uso de antitranspirantes el riesgo de enfermedades relacionadas con el aluminio, incluida la enfermedad de Alzheimer? Mol Med Today. 1998 Mar;4(3):107-9.
6. Dementia Australia. Aluminium and Alzheimer’s Disease. 2008. Disponible en: https://www.dementia.org.au/files/helpsheets/Helpsheet-DementiaQandA19-Aluminium_english.pdf

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