El uso de la sal marina celta en sus recetas no sólo añade un toque único a un plato, sino que también puede proporcionar una serie de sorprendentes beneficios para la salud. Puede ayudar a curar daños en la piel, promover el crecimiento de células sanas y aliviar el dolor de las articulaciones. Muchas personas utilizan ahora variedades naturales de sal como la sal marina del Himalaya, la sal marina celta y la flor de sal, entre otras, porque ofrecen poderosos beneficios para la salud.
Sal marina celta
La sal marina celta es un tipo de sal que se recoge en el Mar Céltico, frente a la costa de Francia. La sal marina se cosecha tradicionalmente por evaporación y secado al sol. Conserva más humedad que la sal de mesa refinada y tiene un tacto ligeramente húmedo. La sal marina también puede ser más oscura y teñida de gris, en lugar del habitual blanco o rosa que se encuentra en otras sales. Esto se debe al alto contenido en minerales que retiene la sal al evaporarse. Por lo tanto, la sal marina es apreciada como una buena fuente no sólo de yodo, sino de muchos minerales esenciales, como el magnesio, el hierro, el manganeso, el zinc, el yodo y el potasio.
Aunque esta sal marina se limita específicamente a la costa occidental de Francia, gran parte de la sal marina que se vende bajo la marca Celtic Sea Salt se cosecha en muchas partes diferentes del mundo.
La sal marina celta ayuda a promover la buena salud al proporcionar una amplia cantidad de potasio. Crédito de la foto:
Beneficios de la sal marina celta
Muchas personas prefieren el sabor de la sal marina, que tiene su propio carácter distintivo dependiendo del lugar del mundo en el que se coseche y de la composición geológica particular de esa zona. Las crujientes escamas de sal marina son especialmente apreciadas para su uso en repostería y presentaciones. La sal marina celta es muy fuerte, con una textura afilada y escamosa que da un chorro de sabor salado.
Sin embargo, también se ha utilizado durante siglos por una serie de beneficios para la salud.
Cura los daños de la piel
La sal marina celta es un popular remojo o lavado para la piel dañada o rota. También se recomienda como exfoliante. La propia sal actúa como desinfectante, mientras que las trazas de minerales esenciales actúan como un bálsamo para la piel lesionada, bajando cualquier inflamación. Los lavados con sal se recomiendan para las erupciones, el acné y la rosácea. Sin embargo, el tratamiento repetido puede resecar mucho la piel sensible, por lo que se recomienda utilizar una crema hidratante inmediatamente después.
Promueve el crecimiento saludable de las células
La sal marina celta contiene 92 minerales esenciales. Veinticuatro de esos minerales se consideran absolutamente esenciales para muchas funciones corporales básicas. Las deficiencias pueden provocar síntomas como espasmos musculares, trastornos del sistema nervioso y daños cerebrales. La sal marina también es más propicia para dejar que los fluidos se muevan fácilmente desde el torrente sanguíneo y por todo el cuerpo. La sal de mesa regular puede conducir a una acumulación de líquido alrededor de las articulaciones y potencialmente edema o problemas renales.
Reduce la mucosidad
La sal marina celta es un gran deshidratador y puede ayudar a reducir la hinchazón en la nariz y los senos paranasales, así como cualquier acumulación de moco en los pulmones. También se recomienda para tratar la retención de agua y la acumulación de líquidos en las articulaciones.
Alivia el dolor de las articulaciones
Recientemente, los investigadores descubrieron que sumergirse en un baño con mucha sal, con un 25% de salinidad o más, ayuda a aliviar la inflamación alrededor de las articulaciones hinchadas por la osteoartritis. Las soluciones con poca sal pueden en realidad agravar las áreas de inflamación, pero el alto contenido de sal deshidrata las células alrededor del área hinchada, bajando la inflamación.
El yodo necesario
El yodo es una sustancia química que su cuerpo no produce de forma natural, pero el yodo es esencial para la regulación hormonal dentro del cuerpo. La glándula tiroides utiliza el yodo en la producción de hormonas. Un signo común de deficiencia de yodo es el bocio en la tiroides. En un estudio realizado por el Dr. Guy E. Abraham, se descubrió que la vitamina C es capaz de transportar más eficazmente el yodo en el cuerpo, lo que convierte a la sal marina celta en un medio eficaz para prevenir las carencias de yodo. Este tipo de carencia también puede provocar infertilidad, y algunos estudios sugieren que es un factor de alto riesgo para ciertos tipos de cáncer. Mientras que muchas sales añaden yodo, la sal marina celta es una fuente natural de este elemento crucial.
Sal marina celta frente a sal del Himalaya
- La sal marina celta se obtiene por evaporación del agua de mar. Suele ser más oscura porque contiene oligoelementos.
- La sal del Himalaya tiene un tono rosa claro, causado por grandes cantidades de óxido de hierro en los depósitos.
- Mientras que la sal del Himalaya contiene más potasio, la sal marina celta tiene menos sodio y más calcio y magnesio.
- La sal del Himalaya se suele moler más finamente, mientras que la sal marina celta se suele mantener en granos más grandes, con el fin de retener el sabor y reducir la liberación de humedad.
Efectos secundarios de la sal marina celta
Hay pruebas de que un exceso de sodio puede provocar hipertensión (presión arterial alta) y es malo para la salud cardiovascular. Sin embargo, los niveles moderados o bajos de sodio son seguros. El límite máximo recomendado de consumo diario de sodio para un adulto es de 2.300 mg. Para las personas con antecedentes de enfermedades cardíacas, o para las que tienen un alto riesgo de padecerlas, el límite máximo se considera de 1.500mg al día. Debido al aumento de los niveles de mercurio, plomo y otros metales pesados en los océanos hoy en día, es muy importante saber dónde se cosecha la sal marina.