Para un adulto mayor, la elección entre la vida asistida y la vida independiente suele depender de la capacidad de la persona para realizar las actividades diarias sin ayuda adicional. Los ejemplos de actividades diarias incluyen, pero no se limitan a: la preparación de las comidas, la higiene personal, la gestión de los medicamentos, la realización de las tareas domésticas, la conducción/coordinación del transporte y el mantenimiento de las finanzas personales. Las personas que tienen dificultades para realizar cualquiera de estas actividades diarias «independientes» pueden considerar el estilo de vida sin mantenimiento de una comunidad de vida asistida.
Vida asistida
La vida asistida es una gran opción para las personas que tienen dificultades con las actividades diarias en casa. Los residentes de las comunidades de vida asistida son libres de vivir un estilo de vida independiente, pero también reciben apoyo regular para una serie de actividades diarias que van desde la limpieza hasta la preparación de las comidas. Los servicios de limpieza y mantenimiento suelen estar incluidos en el alquiler mensual de un apartamento, junto con los servicios de lavandería, servicios públicos, transporte y comidas. Además de disfrutar de la tranquilidad que supone este estilo de vida sin mantenimiento, los residentes pueden aprovechar un completo calendario de eventos, actividades, excursiones e innumerables oportunidades de compromiso social. También hay disponibles servicios de atención adicionales, como la gestión de la medicación o la ayuda para ducharse.
Vida independiente
En contraste con la vida asistida, la vida independiente es ideal para las personas que aún pueden vivir de forma independiente pero disfrutan de tener acceso a la asistencia cuando la necesitan. Las comunidades de vida independiente ofrecen a sus residentes un cómodo acceso a restaurantes, atención médica, entretenimiento y mucho más. El estilo de vida independiente ofrece a los residentes un entorno de vida seguro, pero con una asistencia mínima. Los servicios de hospitalidad, como la limpieza, las comidas y la lavandería pueden o no estar incluidos en el alquiler mensual, pero suelen estar disponibles.
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Elegir entre vida asistida y vida independiente
Al final del día, la elección entre vida asistida y vida independiente debe estar determinada por las necesidades de su ser querido. Muchas comunidades ofrecen opciones de vida asistida e independiente y los residentes pueden ajustar su estilo de vida en función de sus necesidades cambiantes. Infórmese sobre las opciones disponibles en cada comunidad que considere y asegúrese de preguntar sobre los servicios que están incluidos en el alquiler mensual y los que suponen un coste adicional. Al considerar las opciones de residencia para mayores, suele ser una buena idea planificar pensando en el futuro. Incluso si su ser querido no necesita asistencia en este momento de su vida, los cambios en las necesidades de atención pueden hacer que necesite servicios en un futuro próximo. Visite la comunidad y hable con los miembros del personal y los residentes para obtener la información que necesita para tomar la decisión correcta.