EN LA TIERRA DE LOLLAPALOOZA LA EDICIÓN ’92 DE ESTA GIRA DE BANDAS ALTERNATIVAS DE MODA LLEGA A FLORIDA CON SU EMBRIAGADORA MEZCLA DE MÚSICA, CARNAVAL Y POLÍTICA.

Perry Farrell lo imaginó como «una fiesta gigante»

Pero, claramente, incluso el responsable de esta bestia conocida como Lollapalooza subestimó su verdadera fuerza.

Un año después de haber sido conjurado desde la imaginación del ex líder de Jane’s Addiction, Lollapalooza ’92 irrumpe en el Parque Bicentenario de Miami el sábado como mucho más que una fiesta.

La prueba de resistencia conocida como Lollapalooza se abrirá paso en el sur de Florida a partes iguales como circo, espectáculo mutante y carnaval.

Y, por supuesto, habrá música.

A diferencia de los festivales del pasado, en los que se ha presentado un cabeza de cartel de lujo y un puñado de teloneros mediocres, Lollapalooza ofrecerá siete de los actos alternativos más atractivos y prometedores (por orden de aparición): Lush, Pearl Jam, Jesus and Mary Chain, Soundgarden, Ice Cube, Ministry y Red Hot Chili Peppers.

Las puertas del Bicentennial Park se abrirán a las 11 de la mañana. La última actuación, la de los Chili Peppers, tendrá lugar alrededor de las 20.00 h.

Los siete cabezas de cartel actuarán en el escenario principal de la gira. Entre las actuaciones, los grupos locales actuarán en un segundo escenario llamado Stage 2.000. (Para más información, véase la columna de música local de Sandra Schulman, página 19.)

Si bien el foco principal de Lollapalooza ’92 ha sido la música -música que ha atraído a multitudes de hasta 30.000 personas-, el ambiente del festival y una pasarela con una variedad de atracciones también ha ganado atención y notoriedad.

«Digamos que no se parece a ninguna otra gira en la que hayamos estado», dijo el guitarrista-vocalista Jim Reid de Jesus and Mary Chain.

En efecto. Lollapalooza ’92 incluirá el Concurso de rarezas y curiosidades (tragafuegos y tragaespadas incluidos), puestos sociales y políticos, comida étnica y el espectáculo de circo de Jim Rose. También habrá juegos de azar (The Wheel of Safe Sex, Wake Up, Mr. President, What About The Homeless) cuya recaudación se destinará a organizaciones benéficas locales.

«He visitado algunos de los espectáculos paralelos y casetas, pero probablemente haya mucho más que ver», dijo Reid recientemente desde un hotel de McLean, Va. «Están ocurriendo muchas cosas. Nada me ha sorprendido ni me ha dejado boquiabierto, pero probablemente estaba demasiado borracho para darme cuenta»

Una cosa que se está notando es la música que están sacando los artistas en Lollapalooza. En la última lista de Billboard de los 200 mejores álbumes, Ten de Pearl Jam fue el número 5; Blood Sugar Sex Magik de Red Hot Chili Peppers fue el número 11; Psalm 69 de Ministry fue el número 45; y Badmotorfinger de Soundgarden fue el número 80. Honey’s Dead, de The Jesus and Mary Chain, se situó en la lista de Heatseeker.

Si Lollapalooza se presentó en su día como un espectáculo de música alternativa, parece que este sonido underground se está convirtiendo en algo mucho más mainstream y accesible. Este hecho no pasó desapercibido para Reid ni para Paul Barker, de Ministry, cuando decidieron unirse al espectáculo itinerante.

«Es agradable tocar delante de gente que no sabe necesariamente a qué suenas», dijo Barker, bajista y programador de Ministry, desde la parada de la gira en Filadelfia. «Es una de las razones por las que dijimos que tocaríamos. Cuando sales de gira solo, sueles predicar a los conversos. En Lollapalooza tocas para multitudes más grandes»

Reid se hizo eco del sentimiento.

«Supongo que la mayoría de la gente nunca ha oído hablar de la música», dijo. «Algunos no están interesados. Pero queremos que la música de Mary Chain llegue al mayor número de personas posible».

Para los Jesus and Mary Chain, que estuvieron a punto de participar en el Lollapalooza inaugural del año pasado con Siouxsie And The Banshees, Living Colour, Ice-T y Butthole Surfers, no hubo realmente ninguna duda sobre la posibilidad de unirse a la gira. En lugar de tocar para 1.500 fans por noche, Lollapalooza ofrecería multitudes de 15.000 personas. Un público más amplio también podría dar lugar a una actuación en la radio y a un vídeo. Un buen cambio, dijo Reid, siete años después del álbum de debut de Mary Chain, Psychocandy.

«A veces, encuentro las cosas muy exasperantes», dijo Reid. «No nos ponen en la radio, especialmente en la radio diurna en Gran Bretaña. Creo que si la gente compra tus discos, se merece escucharte en la radio. Además, hace cinco años que no hacemos un vídeo. Para Ministry, nacidos hace 10 años de la mano de Al Jourgensen, había varias cuestiones sobre las que reflexionar a la hora de salir de gira con Lollapalooza. El sonido implacable y casi hardcore de Ministry es un asalto técnico masterizado en los estudios Chicago Trax. Su anterior álbum, Rape and Honey, tardó dos años en gestarse.

Barker y Jourgensen también han hecho las cosas a su manera, ya sea eligiendo compañías discográficas o haciendo giras.

«Creo que, en lo que a nosotros respecta, el péndulo se está moviendo en nuestra dirección en cuanto a la opinión pública», dijo Barker. «Nuestro único compromiso, realmente, ha sido salir de gira. No queríamos involucrarnos en ningún punto de vista político, porque lo hacemos todo nosotros.

«Es la primera vez que tocamos al aire libre, y eso limita un poco lo que haces en el escenario. En cuanto a la promoción (Lollapalooza), no puedes decidir con quién trabajar. Con algunos promotores es el clásico ‘(Expletive) you. No volverás a trabajar con nosotros’. Pero cuando formas parte de un paquete, todo está organizado para ti».

A pesar de los compromisos, Barker, al igual que Reid, dijo que Lollapalooza ’92 ha ido bien. «Pero las cosas han ido bien. Normalmente, las bandas se alojan en el mismo hotel. A veces ha habido roces, pero parece que todo el mundo se lleva bien»

«Ha sido estupendo conocer a algunos de los otros miembros de la banda y ver cómo son los demás», dijo Barker. «He intentado ver todos los conciertos que he podido. Actuamos antes que los Peppers y, si te quedas por ellos, tardas una eternidad en salir del cobertizo porque son el último acto. Pero he intentado ver a todos los grupos y darles al menos tres o cuatro oportunidades, porque no todos los grupos tienen un buen espectáculo cada noche».

¿Y quién ha sorprendido más a Barker? El experto en estudios industriales de Ministry se ríe.

«Ahora mismo, creo que mi banda favorita es Lush», dijo Barker de la banda de dream-pop. «Tendría que decir que su espectáculo en vivo me ha sorprendido mucho».

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