Es primavera y el polen flota en la brisa. Para los alérgicos, esto significa, por desgracia, estornudos, mocos, congestión y problemas de picor en la piel. De hecho, afecciones cutáneas como el eczema y la urticaria pueden estar relacionadas con las alergias estacionales. La hinchazón y las ojeras también son una característica frecuente de los alérgicos. He aquí algunas afecciones cutáneas relacionadas con las alergias y la mejor manera de tratarlas:
Eczema (Dermatitis atópica): El eczema no es una alergia en sí, pero puede agravarse por la exposición a alérgenos estacionales. Es una afección en la que la capa protectora de la piel es anormalmente vulnerable a los irritantes externos, lo que suele provocar picor y sequedad en la piel y una erupción que, al rascarse, supura y forma costras. Es importante que las personas que padecen esta enfermedad busquen un tratamiento para sus síntomas de alergia y discutan un régimen de cuidado de la piel con su dermatólogo. Una limpieza hipoalergénica seguida de una hidratación intensiva e hipoalergénica es esencial para reforzar la capa protectora de la piel y obtener alivio. Cuando está activa, la erupción puede necesitar tratamiento con medicamentos recetados.
Urticaria: Estas protuberancias rojas y elevadas que pican en la piel pueden aparecer como respuesta alérgica inflamatoria a cualquier cosa a la que se sea alérgico: picaduras de insectos, polen, alérgenos alimentarios, látex, hiedra venenosa, etc. La primera línea de defensa es evitar estos desencadenantes de la urticaria y hablar con su alergólogo sobre los medicamentos para aliviar la alergia. En algunos casos, las pruebas de alergia pueden ser útiles, aunque la mayoría de los casos de urticaria no tienen un único desencadenante claro. En estos casos, el tratamiento es lo principal, y su dermatólogo puede proporcionarle una amplia gama de tratamientos.
Ojos hinchados y ojeras: El picor, el lagrimeo y la hinchazón de los ojos son otra característica de la primavera para los alérgicos. Lo mismo ocurre con la nariz enrojecida por los estornudos y las limpiezas nasales. Y aunque es difícil evitar frotarse y rascarse, hay que intentarlo. De nuevo, trabaja con tu dermatólogo para encontrar medicamentos y gotas para los ojos que alivien el picor y la inflamación. Darse suaves toques en los ojos con agua fría y utilizar sólo cosméticos hipoalergénicos puede ayudar, al igual que desviar el polen de los ojos utilizando gafas de sol.
Algunas otras formas de mantener su sufrimiento alérgico y el de su piel al mínimo incluyen:
- Ducharse y lavarse el pelo y la cara antes de acostarse para eliminar cualquier alérgeno exterior recogido por la noche, cuando los síntomas de la alergia parecen empeorar.
- Cambiar y lavar con frecuencia la ropa de cama y las fundas de almohada con un detergente sin fragancias ni alérgenos para minimizar la exposición al polvo y al polen.
- Mantener las ventanas cerradas y utilizar el aire acondicionado y los filtros para evitar que el polen del exterior entre en la casa, especialmente en los dormitorios.
- Sacar los zapatos y la ropa exterior en la puerta.
Si su piel sigue picando, hinchada y enrojecida, llame a Avail Dermatology al 770-251-5111. Podemos ayudarle a encontrar soluciones para una piel sana y sin picores.